10 de octubre de 2014

Bailuviando.

Quiero hablarte de nosotros bailando bajo la lluvia. Dando vueltas, saltando y gritando a los cuatro vientos que todo-irá-bien.

Sintiéndonos más cerca que nunca, compartiendo una noche más (pero no una cualquiera) con las personas a las que más quieres en este mundo. Echando de menos a unas y de más a otras tantas.
Sintiéndonos más infinitos que nunca, levantando los brazos para sentir aún más rápido cada una de las gotas que tocan los poros de nuestra piel y abriendo la boca para saborear el momento y no tener después nostalgia de él.

Porque estamos más vivos que nunca, justo hasta el segundo siguiente.


24 de agosto de 2014

mi-edo.

A veces el miedo define quién somos.

Simplemente nos coge por el cuello y nos coloca los pulgares entre respiro y respiro...
Hasta que ya no hay nada en medio.
Es el negro que tanto temen nuestras estrellas y por el que terminan perdiendo su luz propia.

Vive en ecuación indirecta y con ecuación cero podemos vencerlo.
Pero si el número varía todo se complica.

Supongo que, sin más, a veces el miedo define quién somos.





Quería contaros que esta sequía de blog que tengo últimamente, por una de las razones es porque en estos momentos estoy más volcado en otros proyectos. Y uno de ellos es este mismo, mi canal de YouTube.
En él, Leñador y la Mujer América, estoy que no paro junto con la que algunos al menos os sonará su cara, mi amiga Marta.
Este verano hemos empezado con muchísima energía después de un pequeño parón que hemos tenido.

¿Por qué os cuento todo esto? Porque una semana al mes, en concreto la segunda, encontraréis aquello que he ido escribiendo y me he ido guardando para el canal. Personalmente, tengo muchas ganas de que esto siga adelante, y vosotros podéis ayudarme a ello...

Y bueno, espero que os guste MI-EDO tanto como a nosotros grabarlo. Os seguiré informando de cómo fluye todo esto y de todos los nuevos proyectos que estamos preparando.

¡Nos leemos pronto!

11 de junio de 2014

Tienen razón.

Parece que sólo escribimos cuando estamos jodidos, y tienen razón, nadie necesita que le comprendan cuando es jodidamente feliz... (cont.)

Decide, tú, ¿quién si no?
Pregunta, afirma, ¿así?
Sálvate, vive, ¿o qué?

Ahora, sólo ahora, te digo, deja de escribir. 
Que sí, demuestra que tienen razón. Que no vas a necesitar que nadie te comprenda.

4 de enero de 2014

Soy un poco nuevo en esto, tanto que hace doce meses o algo así, no sabía lo que era.
Cada día era cada día, sin más.

Despertarme, existir y acostarme.

Ahora ya nada de eso. Sé lo que es, lo estoy palpando. Y no voy a soltarlo nunca.
Cada día son todas esas oportunidades, sonrisas, cambios... Claro que la lista ha cambiado, un detalle, de los grandes e importantes:

Despertarme, vivir y acostarme.

En algún momento te decides y lo cambias, dejas de existir para comenzar a vivir.
Ese cambio no depende de nadie excepto de ti.

Año nuevo, año viejo, octubre o abril. Da lo mismo. Cada día sirve. Cada momento.
Porque no siempre va a ser de esta manera, quién sabe, ¿no?

En este momento eres infinito. 

A veces nos olvidamos de los detalles y son los más importantes al fin de todo.
Porque, ¿esto qué es sino detalles pequeños que hay saber apreciar que constituyen algo grande...?

                                                                                               Kids - MGMT

2 de enero de 2014

Y te vas.

Ya es hora de que hablemos.

Para qué te vas, si siempre vuelves.
Todo es más fácil si te quedas.

Para qué te vas, contigo todo es mejor.
Incluso nosotros.

Para qué te vas, si no sirve de nada.
Contigo todo se ilumina, todo se ve más claro.

Para qué te vas.
Apuesto que ni tú tienes respuesta.

¿A quién haces bien así?
Yo te digo a quién no.
A mí.
A nosotros.

Ya no es cosa de dos.

Para qué te vas, diciembre.